viernes, 26 de diciembre de 2014
Lejano atardecer.
¿Cómo se habrá visto el atardecer desde la playa? Naranja, rojo, azul y negro. ¿De qué color, de qué textura? Lo imagino reflejado en tu piel, en tus ojos, rozando tus pestañas mientras se lo tragaba el mar. Cada detalle, lo imagino perfectamente desde aquí, dándole otro sorbo al té, pasando a otro capítulo de mi libro. Lo imagino mientras pienso en tus manos, y recuerdo cómo se sienten contra las mías. Y deseo que esta noche pase pronto, y la siguiente, así hasta tenerte a mi lado de nuevo. Porque son pocas las horas que hemos estado aparte, pero creo que cada vez es más difícil y te extraño más. Porque ahora, mi ansia tiene tu nombre y mi desesperación tus apellidos.
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